Toll de l’Esqueix
En el corazón de las montañas de Prades, junto al pequeño núcleo de El Pinetell, se esconde uno de los rincones más mágicos del Brugent: el Toll de l’Esqueix. Una garganta natural excavada por la fuerza del agua durante siglos, donde el río se precipita en forma de pequeña cascada y crea una poza de aguas cristalinas y frías, perfecta para refrescarse en verano.