Netú, el coloso de los Pirineos
Guillem Arnau San Martín Guiral
febrero 21, 2013
Cuentan que hace miles de años la diosa Pyrene hizo una inmensa hoguera que con el paso de los años iría menguando, de esas cenizas, surgió el Pirineo. De las rocas escarpadas empezaron a brotar riachuelos de los sitios más inesperados, formando a su paso miles de ibones, como si de estrellas se tratará. Verdes praderas que no tenían fin, grandes y magníficas cimas que parecían morder el cielo, todo cubierto por las nieves en los fríos inviernos, dando lugar a gigantescos glaciares de peligrosas y temidas travesías. Un entorno incomparable.