Una de las excursiones más populares de Aragón es, sin duda, la ruta de las pasarelas de Alquézar. Pudiendo contemplar durante el itinerario la belleza del último tramo del cañón del río Vero, cuyas aguas han esculpido un angosto desfiladero bajo la villa medieval de Alquézar. Su núcleo urbano, situado en el corazón del Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara, es considerado uno de los pueblos más bonitos de España.
Ficha de la actividad
Distancia | 2,7 km |
Desnivel positivo | 184 m |
Desnivel negativo | 193 m |
Altitud máxima | 660 m |
Altitud mínima | 481 m |
Dificultad técnica | Fácil + |
Dificultad física | Fácil |
Circular | Sí |
Zona geográfica | Alquézar |
Track |
Información
El acceso a las pasarelas está regulado, con el propósito de evitar aglomeraciones y poder dar un mantenimiento constante al recorrido. Por este motivo, todas las personas mayores de 12 años, deben abonar una pequeña tasa municipal para realizar el recorrido. La tarifa es de 3€ por persona en internet y 4€ si se adquiere en la taquilla situada en los bajos del ayuntamiento de Alquézar. Los federados en montaña tan solo debemos abonar 1€. Podéis consultar toda la información al respecto y adquirir el ticket en la página web de las pasarelas de Alquézar.
Alquézar |
Recorrido
Desde los aparcamientos habilitados junto a la localidad de Alquézar y siguiendo las señales que nos guían, descendemos por sus pintorescas callejuelas, con casas empedradas y calles retorcidas hasta la plaza Rafael Ayerbe, en cuyas inmediaciones encontramos el Ayuntamiento de la Villa. Una serie de paneles indicativos nos marcan el inicio del recorrido, justo debajo de la colegiata de Santa María la Mayor.
Una de las pintorescas calles de Alquézar |
Plaza Rafael Ayerbe |
Iniciamos un marcado descenso por el barranco de la Fuente, encajonado entre impresionantes paredes calizas repletas de simas y oquedades. Durante la bajada encontraremos las primeras pasarelas de madera, que facilitan el paso en las zonas más abruptas. Atravesando después zonas umbrías con frondosa vegetación hasta converger con el río Vero.
Barranco de la Fuente |
Abrigos y covachos sobre el barranco de la Fuente |
Cuando llegamos al cauce del río Vero tenemos la posibilidad del visitar la singular cueva de Picamartillo, a unos escasos 100 metros, antes de seguir por las primeras pasarelas aéreas. La cueva de Picamartillo es una espectacular oquedad formada por la erosión del río Vero. Podemos acceder a su interior cómodamente, aunque para ello deberemos mojarnos los pies. En los acantilados de roca caliza que rodean el lugar se puede observar una planta exclusiva de Guara, la trencapiedras (Petrocoptis guarensis). Está muy adaptada a la vida en la roca, muestra de ello es que una vez fecundada la flor, los tallos giran hacia la pared para así introducir sus diminutas semillas en las grietas de los acantilados.
Cueva de Picamartillo |
Posteriormente retrocedemos hasta la desembocadura del barranco de la Fuente, donde comienza el primer tramo de pasarelas metálicas sobre el río Vero. Es un tramo corto, pero podremos empezar a disfrutar de los valores paisajísticos y naturales del cañón del río Vero, que posee de unas cristalinas aguas de gran belleza. Poco después descendemos de nuevo hasta el cauce del río y por un corto tramo de senda alcanzamos el Salto del Azud, construido para llevar agua a la Central Hidroeléctrica de Alquézar. En el azud el río Vero se precipita en forma de cascada, formando una gran poza de aguas turquesa. El azud es de origen medieval, pero se reconvertiría posteriormente para la generación de energía hidráulica. En época medieval su uso era para alimentar un molino harinero.
Pasarelas de Alquézar |
Cañón del río Vero |
Río Vero |
Río Vero |
Salto del Azud |
Salto del Azud |
Tras atravesar un túnel natural formado por gigantescas losas de piedra, iniciamos el siguiente tramo de pasarelas, disfrutando de la parte más encañonada del recorrido. Poco después llegaremos a la Central Hidroeléctrica de Alquézar, donde llegan las aguas procedentes del azud. Destacar que el origen de las pasarelas está estrechamente relacionado con la central hidroeléctrica, ya que las primeras pasarelas, de hormigón, se construyeron a mediados del siglo XX con el propósito de facilitar las labores de construcción y mantenimiento del azud, canal y central. Las pasarelas metálicas actuales se empezarían a instalar sobre el año 2000, enfocadas al turismo.
Túnel natural |
Pasarelas de Alquézar |
Pasarelas de Alquézar |
Pasarelas de Alquézar |
Pasarelas de Alquézar |
Central Hidroeléctrica de Alquézar |
Desde la central el sendero comienza un suave ascenso, alejándonos momentáneamente del cauce del río Vero. Pero tras un giro a la izquierda llegamos al último tramo de las pasarelas, el más largo y aéreo con respecto al río, hay hasta 30 metros bajo la reja. Este tramo nos ofrece unas esplendidas vistas sobre el cauce. Cuando finalizamos las pasarelas comenzamos a ganar altura, culminando en el impresionante mirador del Vero, encaramado sobre un promontorio rocoso.
Cañón del río Vero |
Pasarelas de Alquézar |
Pasarelas de Alquézar |
Pasarelas de Alquézar |
Cañón del río Vero |
Alquézar |
Mirador del Vero |
Finalizaremos el itinerario con el regreso a Alquézar, a través de un soleado camino que asciende rápidamente entre campos de olivos. Buena parte de los viejos olivos que existen en el entorno del pueblo son de la clase alquezrana, una variedad local con gran resistencia al frío. Durante la subida pasaremos junto a una pequeña balsa y finalmente llegaremos a la destacada iglesia de San Miguel Arcángel de Alquézar. Momento de aprovechar para callejear por las calles de este bello pueblo o disfrutar de su excelente gastronomía.
Iglesia de San Miguel Arcángel |
Hola Guillem.
ResponderEliminarEn tres o cuatro ocasiones he realizado este espectacular recorrido, mira que no soy muy de caminos equipados, pero este es de una belleza sin igual, aunque ya tardaban en hacernos pasar por caja, algo que comprendo, no tanto el tema de ponerse casco ...
Siempre que veo el río Vero, me acuerdo de una de mis asignaturas pendientes, el descenso del Vero. El mirador que han colocado al final de las pasarelas, es de un mal gusto ... podían haber hecho algo menos llamativo.
Un saludo
Hola Eduardo,
EliminarSin duda, estas pasarelas han añadido un gran atractivo a la localidad de Alquézar y han contribuido en dar a conocer este bello entorno. Actualmente se pueden hacer sin casco, pero desconozco cuando retiraron la obligatoriedad de llevarlo. Hace algunos años, como mencionas, era obligatorio su uso.
Disfrutar de un lugar tan mágico como las pasarelas de Alquézar en soledad total, ha sido un auténtico privilegio. El descenso del Vero debe ser una pasada, la belleza de los barrancos de Guara no tiene igual.
¡Salud y montaña!